Quiero llorar, es lo único que pienso…¿Con quién protesto?.
Quiero llorar, no por lo que no hacen, sino por lo que hacen:
matar/dañar.
Quiero llorar, no por este mundo desordenado, sino por el desorden
individual que crea todo este mundo desordenado.
Quiero llegar, donde no aterrizan con frecuencia los autos, buses,
aviones u otro medio de transporte: donde está la necesidad y
dolor.
Quiero llegar, sin juguetes, ropa o dinero, quiero llegar con amor,
esperanza o medicina para todos ellos.
Quiero llorar, con aquellos que al igual que yo buscan soluciones
sin depender de promesas.
Quiero llorar, con buenas razones y aún mejor con excelentes
justificaciones.
Quiero llorar por ellos, para cargar el llanto y dolor sin que
ellos se lastimen.
Quiero llegar, con baldes de trabajo y esfuerzo para rociar sobre
los vacíos existenciales y aún más sobre la falta de identidades
nacionales.
Quiero llegar, con propuestas realizables donde el apoyo sea
suficiente para avergonzar a la envidia o soberbia.
Quiero despertar cada vida con aliento, abrir el entendimiento para
que otros no acaben con esta vida determinada antes de la fundación
del mundo.
Quiero un ejército que tenga la suficiente condición mental y
física para juntos encaminarnos hacia la guerra.
Y lloro porque obvio duele…pero lloro como excusa para que otros
junto a mí, después de haber experimentado ese sufrimiento ajeno:
soñemos, luchemos, trabajemos y avancemos…
Christy Petri (Quesada Segura)
